La boda de Tania y Sergio fue una celebración íntima y emotiva, realizada en el  Hotel Posada Real en Puerto Escondido. Con un ambiente que combinaba la belleza natural del lugar con la calidez de una reunión familiar, esta pareja selló su amor en una ceremonia civil, religiosa y simbolica.

El día previo se realizo ceremonia civil en Playa Zicatela, donde se dijeron si acepto! por primera vez. La sencillez y la autenticidad del momento reflejaron el profundo amor que comparten, en un entorno que los acompañó con la brisa del mar y la música de Mariachi con su característico sonido lleno de emoción,  creando una atmósfera tradicional . La música  llena de sentimiento, envolvió a la pareja y sus seres queridos, dando paso a una primera celebración relajada e informal.

Al día siguiente la pareja celebró una ceremonia religiosa que añadió una dimensión espiritual para decir: si aceto! por segunda vez. El atardecer en Puerto Escondido se convirtió en un marco perfecto para esta celebración. La intimidad de la boda, compartida solo con los amigos y familiares más cercanos, hizo que cada instante fuera aún más especial y significativo.

Y por si dos ceremonia no fueran suficientes Después de la misa, Tania y Sergio llevaron a cabo una ceremonia simbólica que añadió aun mas  emotividad al día. Con los últimos rayos del sol del atardecer de Play Bacocho iluminando suavemente el horizonte, la pareja se reunió por tercera vez frente a sus seres queridos para sellar su amor una vez más. Este momento íntimo, lleno de significado, fue un reflejo de su compromiso y de la promesa de caminar juntos por siempre.

Las flores frescas y las hermosas decoraciones fueron obra de Flor Mauli, quien transformó el espacio en un paraíso floral. Los arreglos, llenos de vida y color, añadieron un toque de elegancia natural a la boda, complementando perfectamente el ambiente romántico. La deliciosa cena elaborada con ingredientes locales fue preparada por el Chef Cesar del Hotel Posada Real. Para capturar cada detalle y emoción, Alex Krotkov, estuvo allí para documentar la boda . Sus fotos espectaculares narraron la historia del día, inmortalizando los momentos más especiales con una sensibilidad que solo un ojo experto puede lograr.

La recepción fue una continuación de la celebración del amor. La cercanía de los invitados, la música  y la belleza de Puerto Escondido  crearon una velada llena de alegría y emoción. El Hotel Posada Real, con su encanto y su ubicación privilegiada, ofreció el escenario perfecto para un día que Tania y Sergio, junto con sus seres queridos, recordarán por siempre como el comienzo de su vida juntos en las playas  Puerto Escondido.

Les contó con Amor…

Madame Pechef <3